ALEJANDRA MUNGUÍA CAMBRÁN
• SE FUE RAYADO. Último día del primer mes del 2025, el tiempo se va volando, aunque no creo que opine lo mismo Rodolfo “Fofo” Márquez Alcaraz a quien la autoridad judicial le dictó más de 17 años de cárcel, aunque ya con anterioridad las redes se habían encargado de condenarlo, seguro sí libraba la prisión afuera no le iba a ser nada sencillo. Conste que consta que a mi el chamaco me cae en el hígado y creo que merecido se tiene el castigo, porque a lo mejor no tenía intención de matar a su víctima pero si de hacerle daño y mucho. Nada más me pregunto una cosa, ¿su reacción habría sido la misma si se hubiera tratado de un hombre o nel pastel? Lo que me llama la atención es que más allá de ser un caso mediático o la manga del muerto, lo que me preocupa es que haya tenido o tenga seguidores, que lo cataloguen como un “influencer”, cuando es más que negativa su actitud. Si he de ser sincera ni siquiera sabía de su existencia hasta que se agarró a catarrosos a la mujer, violencia que las redes sociales se encargaron de hacer del conocimiento público. ¿Curioso no?, fueran éstas los que lo elevaron y las que se encargaron de hundirlo. La agresión a la víctima se originó cuando estacionaba su vehículo y de manera accidental golpeó con el mismo el espejo del Audi del cuate. Eso, fue suficiente para propinarle una golpiza donde hasta patadas hubo; el grado de furia fue impresionante. De acuerdo con la mamá de Rodolfo, la cual para mi es igual de culpable que él, en sendas entrevistas externó que siempre que lo veía éste lloraba a cántaros, la realidad es que yo jamás lo vi compungido ni arrepentido, sí con miedo de estar encerrado pero nada más. Los que lo seguían en redes, señalan que el cuate es misógino, seguro lo parió la tierra, y eso debe haber influido en la decisión del juez para la condena que pudo haber sido de 45 años.
• LES ENCANTA EL PLEITO RIDÍCULO. Cual vieja de vecindad, muy al estilo de Lenia Batres, y como si el país no requiriera su atención en una y mil cosas mucho, pero mucho más importantes, la calca tilica y flaca anunció (no entiendo qué espera), una carta a Google para exigir que se rectifique el cambio de nombre del Golfo de México a Golfo de América y, de paso, que se incluya el término «América Mexicana» en los mapas. ¡Qué flatulencia! Resulta que el “oráculo del saber”, adoptará el nombre de “Golfo de América”, sustituyendo a Golfo de México. De suceder eso, Google, no solo le daría la razón al peje naranja, Donald “N”, sino le seguiría el juego de la ocurrencia que tuvo después de fumarse el tapete. Pero, ¿por qué ponerse así de loca, cuando la 4T tiene a sus Golfas de México? y son varias, ahí si nadie se las va a pelear. Primero, le compró a Andrés “N” su pleito con España; después, según ella, se le puso al brinco al peje naranja y ahora va con Google. ¿De verdad, no tiene algo mejor que hacer? Qué le parece destinar todas sus energías a la galopante inseguridad que vive el país; abastecer de medicamentos; los feminicidios; la economía y bueno una interminable lista.
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