ALEJANDRA MUNGUÍA CAMBRÁN
MORENA LO LOGRÓ. La desesperanza y la desilusión que ocasionaron los resultados de la pasada elección en la gente que no simpatiza en nada con la 4T, se encuentran a flor de piel y ha sido tan grande que en las redes hay una total negativa de quienes siempre se unían para ayudar (obvio los clasistas, fifís, neoliberales, hipócritas y demás calificativos que ha puesto López Obrador a la clase media) a hacerlo nuevamente; al parecer el huracán OTIS fue el último que los unió. Veamos lo que pasó ahí, los acapulqueños eligieron nuevamente a una presidente municipal que a todas luces no hizo gran cosa y favorecieron otra vez a un partido que no sólo se burló de ellos, sino que bajita la mano les dijo rásquense con sus uñas. Muchos creímos que no volverían a tropezar con la misma piedra y lo hicieron. Entonces, la sociedad civil que siempre se organiza en esta ocasión dijo “nel pastel” no más y que la gente de Chetumal, Quintana Roo, disfrute lo votado y utilice los pesitos que obtuvieron al vender su voto (que seguro se reventaron ese mismo día) para salir del daño ocasionado por las inundaciones. Y de verdad, me he llegado a preguntar ¿qué México ven los simpatizantes de Morena? ¿Acaso solamente somos unos pocos los que sentimos el miedo y la desesperanza?; ¿Son ellos inmunes a la inseguridad; a la política de los abrazos y no balazos; al avance con permiso presidencial de los cárteles de la droga; la falta de medicamentos; el robo en despoblado de los fideicomisos y en las obras “emblemáticas” del invasor de Palacio; el desvío de Segalmex; la quiebra de Pemex; la desfachatez y el tráfico de influencias de los hijos de López; el servicio médico de mierda que hay; a la inflación; la falta de agua, etc.? El asunto es que todo el fin de semana se puso a discusión si se ayuda o se deja que disfruten lo votado. ¿Cuál es su opinión?
EL TRIUNFO DE XÓCHITL GÁLVEZ. Muchos cuestionan a quienes ahora se niegan a ayudar a Chetumal si en el muy pero muy remoto caso de que la senadora Xóchitl Gálvez hubiera ganado las cosas serían diferentes. No pueden obligar a la oposición a ayudarlos, pero si pueden exigir que Andrés Manuel López lo haga, claro, debe estar gastadísimo con esos de las elecciones. Y es cierto, lo que cambiaría para Chetumal con el triunfo de Xóchitl Gálvez es que ese sector opositor se uniera de nueva cuenta para mandar víveres y ayuda, porque les guste o no, son los integrantes de la clase media a quienes tanto ha ofendido López los que ayudan y fueron quienes recibieron una bofetada de realidad en las pasadas elecciones. HABRÁSE VISTO SEMEJANTE COSA. ¡Qué rara simbiosis hay entre Claudia Sheinbaum y López Obrador! ¡Qué haberse ido juntos de gira! Si está como muy enfermo y conste que no me estoy imaginando cosas más allá de eso, pero ¿cuándo se había visto semejante cosa? Neta es inédito que un presidente electo salga de gira de trabajo con el aún mandatario en funciones. Obviamente, le está dejando algo claro “sin mi inche esqueleto no eres nadie” y ese era el temor que parece cristalizarse hoy, López Obrador seguirá presente para maldición de muchos y consuelo de tontos. Sheinbaum Pardo nunca se emancipará del peje y deseo de todo corazón equivocarme.