Tras una extensa investigación periodística, que incluyó entrevistas con ex colaboradores, clientes, proveedores, autoridades y el análisis de documentación relevante, este medio confirma que Francisco Javier Belgodere Hernández se encuentra completamente deslindado de BANXOL DE MÉXICO, empresa que cambió de propietarios a inicios de este año.
Los testimonios recabados revelan un panorama alarmante tras la adquisición de BANXOL por parte de ARIHUS, propiedad de Humberto Campos. Según un ex colaborador, quien decidió mantener su identidad en el anonimato por temor a represalias: «Todo iba bien en la empresa, teníamos estabilidad y orden, pero desde que ARIHUS y su propietario Humberto Campos tomaron el control de BANXOL se vino abajo. Un día simplemente dejó de contestar el teléfono y de pagar las nóminas.
«Por su parte, clientes afectados relataron que desde el pasado 10 de septiembre BANXOL dejó de prestar servicios de manera repentina y sin previo aviso. Hasta la fecha, no han recibido comunicación oficial por parte de la empresa ni de sus directivos, lo que ha generado incertidumbre y preocupación en el mercado.
En un esfuerzo por obtener respuestas, este medio intentó contactar a Humberto Campos, actual CEO y Presidente de BANXOL DE MÉXICO. Sin embargo, Campos se negó a proporcionar declaraciones sobre la situación.
Francisco Javier Belgodere Hernández, ex directivo de la empresa, compartió su postura respecto a los hechos. En entrevista, lamentó profundamente el impacto negativo en los colaboradores y demás afectados: «Es una tristeza lo ocurrido, en especial por el equipo de trabajo, quienes son excelentes personas y profesionistas. Se han comunicado conmigo diversos acreedores, clientes y proveedores, con quienes hemos platicado un plan de trabajo buscando que todos logremos la recuperación de las pérdidas que nos ha ocasionado el incumplimiento de los nuevos propietarios, a quienes seguimos buscando con el afán de encontrar una salida amistosa a esta situación.
«La situación de BANXOL DE MÉXICO evidencia la importancia de un manejo transparente y responsable en los procesos de transición empresarial. Mientras tanto, ex empleados, proveedores y clientes continúan buscando respuestas ante el abrupto cese de operaciones.