Por Alfredo Oropeza

Con el transcurrir del tiempo, se ha venido develando qué es lo implica la denominada Cuarta Transformación de la vida pública de México, o bien conocida como 4T. Para muchos nos queda claro que implícitamente la 4T refiera aun calificativo o rango de gobierno y sociedad, a la que aspira su ideólogo e impulsor: un gobierno y una sociedad de cuarta.

El gobierno de 4Ta. lo encontramos bien representado, desde la cabeza hasta los pies, con un presidente, un gabinete y funcionarios públicos federales mediocres, con una preparación mediocre y con resultados mediocres.

Pero la aspiración de López Obrador va más allá, no contento con el desmantelamiento, la parálisis e ineficacia del aparato de Estado, también anhela una sociedad de 4Ta., representada por habitantes conformistas, sumisos y abnegados.

En la parte que le corresponde (el gobierno), López ha sido fecundo en sus propósitos, conduciendo al país fijando la mirada en el espejo retrovisor de la historia, con políticas públicas retrogradas y caducas, hundiendo al gobierno federal en la parálisis y administrando sólo las justificaciones, las culpas y los pretextos.

La productividad del presidente se da un par de horas al día y sólo en las mañaneras, donde ha batido cifras récord en la fabricación de mentiras.

López llegó a su 3er Informe de Gobierno con un palmarés de 61 mil 79 mentiras, desde su primer mañanera; así lo registró el Buró de Consultores Políticos (SPIN), quien devela que el jefe del ejecutivo ha falseado datos 89 veces en promedio, cada vez que se planta frente al atril.
También, están los otros datos que niega, oculta o ignora el presidente:

En combate a la corrupción, a la fecha no se ha detenido o juzgado a ningún funcionario o exfuncionario federal por actos de corrupción.

Salvo el caso de Rosario Robles por vendetta personal y las persecuciones políticas a los posibles contrincantes de su sucesor (Ricardo Anaya, García Cabeza de Vaca y Samuel García); fuera de las inquisiciones políticas, ningún pez gordo ha caído tras las rejas, sino todo lo contrario: Elba Esther Gordillo fue liberada, Lozoya disfruta de la impunidad y gracia otorgada por el gobierno, como testigo protegido y de dudosa calidad moral; mientras que familiares y amigos del presidente gozan de la tranquilidad de saberse absueltos de actos de extorsión, corrupción y por aceptar dinero en efectivo, aun con videos de prueba difundidos públicamente.

 En salud, la primera calamidad fue la desaparición del Seguro popular y la creación de Insabi, que desmanteló todo el sistema de salud, de adquisiciones y atención médica. Para que así desprevenidos, con un presidente ignorante, un secretario de salud de florero y un subsecretario servil e indolente, nos cayera la plaga del Covid-19 y transitáramos sólo a la buena de Dios, alcanzando a la fecha más de 3 millones 600 mil contagios y la muerte de más de 300 mil personas.

 En seguridad, ¡lo mismo!, el desmantelamiento de la Policía Federal para crear el cuerpo paramilitar de la Guardia Nacional, que sólo es un cuerpo testimonial ante el control de plazas por parte de la delincuencia, dedicándose sólo a corretear inmigrantes; mientras que, a septiembre de 2021, se han asesinado a más de 90 mil personas, es decir, 97 víctimas al día.

 En economía y empleo, las cifras son catastróficas y desalentadoras. López Obrador se ha convertido en el espantapájaros de las inversiones y, por tanto, el crecimiento económico y la creación de empleos han tendido a la baja y con números negativos (antes y después de la pandemia), estimándose la pérdida de cerca de 500 mil empleos, en lo que va del sexenio.

Pero López Obrador no está satisfecho, pues a pesar de sus mediocres y negativos logros, la sociedad mexicana (o una parte de ella) no le es agradecida, abnegada y obediente; sino todo lo contrario, esa ciudadanía que gusta de informarse, que es crítica y aspira a salir adelante y superarse, es la que más le incomoda y ataca el presidente, desde su púlpito en Palacio Nacional.

Esa clase media y clase media aspiracional está muy lejos de esa sociedad conformista y domesticada que desea AMLO, para así poder concretar la transformación que tanto impulsa y alcanzar ese México de 4Ta. al que tanto aspira.