Por Alfredo Oropeza
El encargado de controlar la pandemia en nuestro país, el subsecretario de Promoción y Prevención de la Salud, Hugo López-Gatell, está hospitalizado desde el pasado miércoles por covid-19, reconoció el pasado domingo la Secretaría de Salud.
El equipo médico del funcionario decidió hospitalizarlo y ha estado desde el miércoles internado con una evolución favorable, ya que, la hospitalización fue «anticipada» y «preventiva» ante una «posible complicación», reveló Ruy López Ridaura, director General del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) de la SSA.
Pero el contagio de López-Gatell va más allá del Covid-19, el verdadero contagio es de servilismo ante el presidente López Obrador y de arrogancia ante el respaldo incondicional que éste le da, con tal de maquillar cifras y minimizar la magnitud de la pandemia desatada en México.
Paradójicamente, el Subsecretario de Salud ahora es parte de esa dolorosa estadística de los 2 millones 92 mil 810 mexicanos oficialmente contagiados; afortunadamente hasta ahí quedó y no pasó a ser uno más de los más de 300 mil personas fallecidas a causa del virus.
Hay que reconocer que el gobierno de 4Ta. ha sabido sortear bien el juicio ciudadano y distraer de manera efectiva a la opinión pública, para reducir el impacto y la opinión desfavorable, ante el pésimo manejo de la pandemia y las erráticas e indolentes acciones para controlar y reducir el ritmo de contagios y, por añadidura, el número lamentable de muertes originadas por el Covid-19.
La evidencia de tal habilidad, de pasar inadvertidos en el desempeño mediocre y el fracaso indolente del gobierno federal, lo revelan las encuestas de opinión pública, donde ante los hechos, la población sigue aprobando y respaldando la gestión de López Obrador, al grado de lograr un gran respaldo ciudadano rumbo a las elecciones del presente año, pudiendo lograr sostener las mayorías en la cámara de diputados federal, e incluso, con la posibilidad de arrasar en algunos distritos, a pesar de las alianzas opositoras.
Lejos está la gran mayoría de la población mexicana de cuestionar porqué nuestro país es el decimotercero con más contagios en el mundo, pero el tercero con mayor mortandad. Dato que sencillamente explica que el gobierno de López fue rebasado por la realidad y que sus errores y torpezas han derivado a que en México más personas mueran por covid-19, que en cualquier parte del mundo.
No es casual, que presidente López Obrador esté considerando pedir al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que valore compartir parte del suministro de vacunas contra el coronavirus, cuando celebren un encuentro virtual el día de hoy. Ya que, incluso, la estrategia de vacunación también derivó en un rotundo fracaso y sólo ha sido causa de duros señalamientos y evidencias del uso electorero de las pocas vacunas recibidas por el gobierno de 4Ta.