Toluca, Méx.— Las autoridades buscan meter en cintura a quienes operan grúas en el Estado de México, para evitar la corrupción y altos cobros, de hasta 6 mil pesos por arrastre, con el establecimiento de tarifas.

La operación de grúas y corralones en la entidad mexiquense es descrita por transportistas de carga y automovilistas como abusiva, con cobros excesivos, aun cuando no haya tarifa, y en ocasiones relacionada con montachoques, además de policías de tránsito municipales ligados a una sola empresa que, acusan, engaña y ven corrupción.

A la par, los empresarios del sector de zonas del Valle de Toluca quedaron rebasados, pues, afirman, fueron relegados por las que trabajan en Valle de México pues eran las únicas con permiso para el arrastre de vehículos.

Por ello, diputados locales avalaron, con el apoyo de la Secretaría de Movilidad, la creación de la Norma Técnica para los Servicios de Arrastre, Depósito, Guarda y Custodia Vehicular, bajo la cual quede regulado el servicio, además de establecer reglas para la apertura de corralones.

Es así que, de acuerdo con el tabulador publicado por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), dependiendo el tipo de grúa, se cobrará 18.82 pesos por kilómetro y 528.69 el banderazo en el tipo A, y hasta 32.35 pesos y 885.84 el banderazo de la tipo D.

Problemas a través de los años

La operación de las grúas no sólo era criticada por los abusos, sino que protagonizaron hechos violentos, especialmente en el municipio de Ecatepec. En 2020 hubo un enfrentamiento por el control del servicio en dicho ayuntamiento entre miembros de la empresa Sartec y los de Alianza 2020, lo que dejó un conductor muerto, cuatro detenidos y uniformados lesionados, además de varias grúas, patrullas y taxis destrozados.

La irregularidad en el servicio fue creciendo, especialmente en vías del oriente mexiquense, explicó el representante de agremiados de la Alianza Mexicana de Organizaciones Transportistas (Amotac), Pedro Vaca Almaguer, pues, dice, en contubernio con elementos de la policía estatal y municipal, los cobros cada vez más excesivos llegaban hasta los 6 mil pesos.

Mientras que algunos usuarios entrevistados coincidieron en que el costo del servicio de arrastre que hacen las grúas en municipios del Valle de Toluca va de los mil 500 pesos y hasta los 3 mil pesos, según la distancia.

Ahora, con la norma, cuya publicación en la Gaceta Oficial del gobierno mexiquense está pendiente, por primera vez habrá tarifas fijas para las grúas y corralones. Autoridades estiman que se publique en julio próximo.

Las nuevas reglas incluyen la obligación para que los prestadores del servicio porten una aplicación digital mediante la cual se dará seguimiento al vehículo para vigilar su estancia en el corralón, y así evitar el desvalijamiento o daños a la unidad; tendrán que exhibir la tarifa, además la revisión del otorgamiento o revocamiento de la concesión.

Los costos

De acuerdo con Alejandro Montes de Oca, director general de Movilidad Zona II, la tarifa inicia con el denominado banderazo por el servicio, es decir, cuando una grúa va por un vehículo.

En el caso de los tipos sedán y camionetas, el banderazo llega hasta los de 840 pesos, el arrastre por kilómetro hasta 30 pesos; el abanderamiento o las maniobras de las grúas para avisar que van a desplazar un vehículo es, en promedio, de 500 pesos por hora.

El tiempo de espera en caso de maniobra adicional —porque no puedan llevarse la unidad de inmediato ya sea por un siniestro donde hay dos autos involucrados que impiden moverlos o está impactada la unidad contra un muro de contención—, tiene un costo promedio de 380 pesos.

La maniobra de salvamento por hora es de hasta 720 pesos, el concepto es únicamente cuando un automóvil se volcó o tuvo un impacto grave.

Servicio controlado y regulado

El director destacó que la norma estipula que los elementos de tránsito municipal, policía o ministerios públicos deberán sujetarse a la herramienta de Rol de Guardia.

Es decir, la Secretaría de Movilidad tendrá un control de las empresas prestadoras del servicio, bajo el que establecerán un rol; por ejemplo, si en el municipio hay tres servicios, la dependencia asignará un día de la semana a cada una, para que sea un servicio escalonado y con ello evitar el favoritismo.

La norma precisa que las grúas no podrán tener una antigüedad superior a los 10 años, tener videocámaras, y los corralones deben contar con una herramienta digital para consultar las tarifas.

Esos sitios también deberán exponer, en lugares visibles y al público, su razón social, los requisitos para la liberación de los vehículos, los costos vigentes y un letrero de consulta de la app.

Tendrán que mostrar en tiempo real las condiciones de las unidades durante su permanencia, contratar seguros y asumir la responsabilidad por cualquier daño que sufran ahí.

Para su apertura, también hubo reformas. Para ser concesionarias del gobierno tienen que cumplir con los estándares de calidad y se confía en que 70% de las empresas que actualmente operan se ceñirán al reglamento.

Por otra parte, para facilitar las herramientas tecnológicas con las que deben contar los servicios tanto de grúas como corralones, será el gobierno mexiquense quien diseñe el software.

A través del centro de informática del gobierno estatal, construyeron la aplicación y llevan a cabo las pruebas piloto, para que funcione 100% al entrar en vigor la norma.

Con información de El Universal.