• Se heredaron 6 créditos fiscales que fueron liquidados en tiempo y forma.• Ello permitió salvaguardar la hacienda municipal y cumplir con la ley.
A pesar de la declaración de improcedencia de la segunda sala regional con sede en el Estado de México y de que el gobierno de la alcaldesa Angélica Moya Marín había pagado ya al Sistema de Administración Tributaria 6 créditos fiscales heredados del gobierno de Patricia Durán Reveles, el SAT pretendió que se volvieran a liquidar en perjuicio de la hacienda municipal, pero jamás existió amparo alguno para no hacer frente a los adeudos.
La ex presidenta municipal Moya Marín, explicó que su gestión recibió 6 créditos fiscales autodeterminados, que correspondían a los años 2020 y 2021, en los cuales se reclamaba el incumplimiento en el pago del Impuesto Sobre la Renta, retenido a los trabajadores en la administración morenista.
Resulta importante, dijo, aclarar los señalamientos de la actual tesorera municipal, Claudia Oyoque Ortiz y del presidente local, Isaac Montoya, quienes acusan a la administración 2022-2024 de ampararse para no cumplir con sus obligaciones fiscales, cuando en realidad se contravinieron ante el SAT dichos créditos, para no incurrir en un pago sin certeza jurídica, ocasionando una doble liquidación y una posible observación por parte de los órganos fiscalizadores.
Fue la administración 2022-2024, la que solventó los créditos fiscales antes mencionados, por un importe de 740 millones 008 mil 501 pesos, documentación que se encuentra en los expedientes respectivos y que le fueron entregados a Montoya. El incumplimiento de la administración morenista fue remitido a la Contraloría Municipal, con el objetivo de sancionar a Leopoldo Corona, tesorero en la gestión de Durán Reveles.
Moya Marín agregó que a pesar de los 6 créditos fiscales pagados al SAT, esta instancia reclamó de nueva cuenta el pago de los periodos abril 2020, junio a diciembre 2020 y enero a septiembre 2021, cuando ya habían sido liquidado, a través de 4 nuevos créditos fiscales, que incluían la suerte principal, recargos, actualizaciones y multas, así como un crédito fiscal de la revisión del 2018.
“Derivado de un análisis realizado por mi gestión y conforme a derecho, se determinó que se estaba realizando doble cobro de la suerte principal, recargos y actualizaciones de algunos periodos, así como la imposición de multas no motivadas, por parte de la autoridad fiscal”, señaló la ex presidenta municipal.
En referencia al crédito fiscal de agosto a diciembre del 2020, se declaró por parte de la segunda sala regional norte – este del Estado de México, la improcedencia del crédito fiscal, declarando así la nulidad lisa y llana de este, con lo que se ratificó la hecha por las demás instancias.
Pese a ello, el SAT, volvió a establecer un nuevo crédito fiscal, actuando en contra de la sentencia ya ratificada, por lo que, conforme a lo estipulado en el Código Fiscal de la Federación, se ingresó una queja contra la nueva determinación.
